14 septiembre, 2005

Antes de viajar

En unos momentos más, estaré arriba de un bus rumbo a Santiago. Es un viaje de mierda, lo sé, pero a estas alturas se hace necesario descender al inframundo de la capital. Ese extraño ser que descubrí en mañanas completas de ocio, a veces solo y otras junto a los caballeros de la mesa redonda.
La paranoia, cuando se viajan distancias largas, es bastante común. Que la velocidad, que cómo maneja así... patrañas!!! En los viajes, me quedo dormido como un tronco (pregúntenle a Viddeara). Es más, el record es la primera vez que salí de Antofagasta para las vacaciones de verano... para los que se ubiquen: dormí desde La Negra (la salida sur de la ciudad) hasta pasado el tunel El Melón. Esa es mi idea de un viaje.
Asimismo, es obvio que el tema musical no puede estar ausente. Esa vez, dormí escuchando el acústico de Incubus. Para esta ocasión, viajo con una mezcla extrañísima, en la que se puede encontrar a Kiss, Pearl Jam (a propósito de la visita en noviembre), The Soft Machine y Trey Anastasio. Este último, a modo de noticias, colaboró en la última placa del gran Herbie Hancock (una de las leyendas del jazz-fusion, dicen por ahí). Aún no escucho completo el disco, pero por lo que oi de una pasada, se percibe un aire muy interesante.
Espero con ansiedad el viaje a la capital. Además de la oferta musical, no hay nada como la casa de uno para refrescarse con nuevas y mejoradas ideas.

11 septiembre, 2005

Nacido un septiembre

Hace treinta y dos años, mi hermano nació. Mis padres, que en ese momento tenían unos veinte años, sólo imaginaban lo promisorio de un futuro, no excento de trabajo, por cierto. Hace treinta y dos años, yo ni siquiera pensaba en existir, pero hubo un hito que marcó la fecha con fuego y sangre... mucha sangre y sufrimiento.
Es cierto que las cosas eran bastante lejanas a lo que son ahora. Es cierto que, en el mejor de los casos, la oferta de consumo y demanda era insuiciente y en gran medida la historia ha demostrado que aquellos que poseen los medios (y los poseían en ese entonces) fueron los únicos resposables de aquello. Siempre recuerdo unas palabras de Pepe Cademartori :"antes del golpe, no había nada, pero misteriosamente todo aparecio el día después del golpe". Curiosidades de la vida. Lo cierto es que, hace treinta y dos años, los sueños de muchos fueron y continúan siendo aplastados, antes por la ota militar, ahora por los zapatos de aquellos que se protituyeron al poder y, antaño, reclamaban mayores oportunidades y se hacían presentes en el sueño de la Unidad Popular.
Ahora, escucho a Lagos decir "estamos cumpliendo las palabras finales del presidente Allende". ¿Con qué cara dice eso? ¿Acasio aseguró la salud y la educación gratis? ¿Acaso dio las garantías para viviendas dignas? Que el crecimiento económico aquí, que la macroeconomía allá... la famosa teoría del chorreo económico nunca ha sido ni será realidad. Que el famoso "crecer con igualdad", "viva el cambio" o el "siempre contigo", en dos casos, hacen que Allende se revuelque en la tumba viendo en lo VENDIDOS en que se han convertido sus "hijos políticos" y, en la famosa frase, en la pena de que ahora, cualquier imbécil manipulable por la oligarquía y el fascismo entre con tanto beneplacito en un sector que con suerte tiene para comer, cuando el sujeto en cuestión era un cómodo alcalde en Las Condes.
Nacer en septiembre es complicado. Nací cuatro días antes del 11. Cuatro años antes del atentado contra el viejo sátrapa. Ví, a los cinco años, como salían las FFEE de los pacos a pegarle a gente que decía "NO MÁS DICTADURA". Ví como un tipo con casco, en una fecha lejana, agarraba a una chica del pelo y le daba con la luma, mientras los demás corríamos perseguidos por la fuerza represiva. Viví en carne propia como la CNI secuestró a mi prima menor y torturó a mi tía, mientras acusaban bajo ningún fundamento, al paso que lo torturaban.
Vi el miedo en el rostro de mi madre y de padre, cuando pequeño, en inumerables ocasiones. ¿Acaso es malo pedir el repeto a los derechos humanos, a una vida sin sobresaltos y justa para todos?¿Por qué, en los 17 años en que Pinochet estuvo en el poder, las riquezas de unos pocos se acrecebtaron estratosféricamente, mientras el setenta porciento de los demás apenas se sotenían y, de ese porcentaje, casi un treinta no tiene qué comer?
Asumo que a esa realidad se refería Lagos cuando, en este día, dice sin verguenza "se está cumpliendo el sueño del presidente Allende". No veo cómo sea así: aún no se abren las grandes alamendas, por donde pase el hombre libre. Es más, estás se cierran cada vez más, dejando a los pocos asegurados mantenerse allí, como aves de rapiña depredando el cadaver de la "equidad social" que llaman algunos.
Nací en septiembre. Mes de las fiestas patrías para algunos. Para otros, mes de la reconciliación. ¿Para mi? mes en el que no olvido ni perdono, hasta que se haga justicia como debe ser.

08 septiembre, 2005

Ver a través de los cristales

Nunca he sentido verdadero enojo. Ese que hace al hombre llegar a cometer atrocidades dificilmente imaginables. Tampoco he percibido el verdadero odio, el que hace otras cosas peores en las personas. Simplemente, llegó a sentarme en el banco y observo. Me agazapo y observo. Casi como una gragola petrificada en las alturas.
Recurrente es que se escriba: "veo a la gente como hormigas". Pues bien, en vista de las infintas veces que esto se ha dicho, no es necesario repetirlo. Baste saber con que, en medio del ajetreo citadino o el sopor provinciano, hay cosas que no cambia y esa es una: el conglomerado de mamíferos semi concientes que buscan pisar al otro a la menor oportunidad. Nuevamente, me hago el loco con Darwin y su selección natural... ¿será que, de una forma misteriosa y oculta, vio lo que sucedería con la humanidad?
La vida sigue senderos. Unos normales, otros increiblemente bizarros. Las memorias parecen fotos secas, arrugadas bajo el sol, mientras que las sensaciones son las que construyen toda una experiencia... o mejor dicho experiencias; hace poco, comentaba en un almuerzo que deseaba profundamente tener en mi memoria la sensación de recién haber aprendido a caminar. La dicha de sentir toda una nueva visión de mundo es algo que espero detectar antes que el tiempo vuele.
La brisa refresca. Soporta a los impenitentes y a los justos. Aguanta a violadores y a abogados. Es casi un saldo de equidad en un lugar que tiene de todo menos eso. Si quepa alguna duda, pregúntenle a los "señores políticos" (como hablaba un viejo indecente, mentirosos, asesino y ladrón), esa especie de extraños seres que pretenden solucionar todo enriqueciendose a costa de los demás. Una buena solución, si me preguntan. Lo mismo corre para los "señores empresarios", que a la primera mención de "impuestos especiales", lloran a mares porque "no se respetan las normas" o algo así. Suenan como los fonderos a finales de este patriotismo extraño de nosotros :"nos fue mal" dicen ellos todos los años.
Las calles son angostas. Parecn sumideros inacabados, hechos a la rápida por el constructor de turno. Los rostros largos y tediosos siguen en la misma línea. ¿Yo? bien, gracias. cumplí 24 y aún miro todo desde la comodidad de mi silloncito.
(dedicado a Viddeara)